La iglesia conventual de Santa Clara, que está situada en la parte más elevada de la ciudad de Molina de Aragón, fue construida a finales del siglo XIII en estilo románico ojival, con piedra de sillería, y tiene planta de cruz latina, aunque con los brazos de la cruz son de pequeñas dimensiones.8​ La cabecera de la iglesia termina en un ábside semicircular, ante el que está situado el presbiterio del templo, que es pequeño.9

El templo cuenta con una sola nave, y a los pies de esta última está situado el coro de las monjas.8​ El muro occidental de la iglesia fue derribado para poder ampliar el convento, y el templo está cubierto por bóvedas de crucería simples, propias del estilo ojival, que descansan sobre arcos fajones sostenidos por grupos de tres semicolumnas adosadas a los muros, cuyos capiteles son de estilo románico, al igual que los de las columnas que sustentan los arcos torales del presbiterio y del ábside, y están decorados con hojas de palma.8